Si decide participar en un ensayo clínico, es posible que reciba atención médica y recursos de mayor calidad. Muchos ensayos clínicos requieren más pruebas y visitas al médico de lo habitual. A menudo tendrá acceso a un equipo de médicos, enfermeras, trabajadores sociales y dietistas de ensayos clínicos que controlarán su salud.
En algunos ensayos clínicos, el tratamiento que se está probando es más seguro y efectivo que cualquier opción existente. En estos casos, los participantes son los primeros en beneficiarse de importantes avances en la atención médica.
Sin embargo, si el nuevo medicamento o tratamiento es menos efectivo, o incluso perjudicial, es probable que su médico le retire del ensayo clínico y busque una mejor opción de cuidado médico.
Si bien no hay garantías en los ensayos clínicos, es importante que tenga expectativas lo más claras posible antes de ofrecerse como voluntario. El consentimiento informado se utiliza con este propósito. Como parte del proceso de consentimiento, puede hacerle al investigador o proveedor de atención médica todas las preguntas que tenga. También recibirá información detallada sobre las instrucciones, procedimientos, beneficios y riesgos del estudio. No puede participar en un ensayo clínico hasta que firme el formulario de consentimiento informado final.